Desde hace algún tiempo algunas entidades utilizan slack para diversas tareas. A mí me parece una especie de servidor de irc gráfico, capado, comercial y poco útil, pero como en tantas otras situaciones donde una tecnología parece más fea, difícil de usar y antigua, surgen aplicaciones vendehumo que con las mismas o parecidas funcionalidades –normalmente más capadas que las originales–, conectadas con otras tantas aplicaciones vendehumo –por lo cual parece que son capaces de interconectarse con cualquiera– tienen un logo y una estética –lo que algunxs asociarán también al UX– atractiva y además puedes poner emoticonos y subir emoticonos… En resumen, un caramelo en la puerta de un colegio de esos que mi madre y mi padre me decían que no aceptara.